La estrategia para una WFI con equipos de membrana

Al no haber destilación, no se utiliza energía para calentar y enfriar, salvo en la sanitización. El sistema de membrana ofrece un mayor rendimiento de agua en lugar de destilación y pretratamiento. No usar sal es doblemente bueno para el medio ambiente: el proceso simplificado reduce considerablemente la huella de CO2 dentro de la logística del transporte y, dado que no se produce la regeneración del descalcificador, las aguas residuales que contienen cloruro también son cosa del pasado.

Evitar el consumo es una protección ambiental inteligente y sostenible.

Máxima calidad y seguridad. En la producción de WFI debido a la barrera de triple membrana y la eliminación del descalcificador microbiológicamente crítico.
En la producción con WFI rentable en lugar de PW, y también la opción de alarma adicional y límites de acción.

Uso de superficie menor. Menor volumen de inversión. Menores costes de operación. El WFI fría se paga sola.

La importancia de la evaluación de riesgos al diseñar sistemas para fluidos ultrapuros, ha crecido desde la aprobación de los procesos de no destilación basados en membranas para generar WFI. El enfoque principal radica en el pretratamiento.

Sin un pretratamiento adecuado, los elementos incrustantes presentes en el agua potable, obstruyen rápidamente la etapa de trabajo más importante, la de la ósmosis inversa. Dos procesos ofrecen la solución: una descalcificación a través de intercambio iónico o una dosis de lo que se conoce como antiescalante.

Con el agua no tratada, a menudo estancada en el descalcificador, la gran superficie de la resina representa un riesgo microbiológico considerable. Se puede controlar de forma segura mediante el funcionamiento continuo, el uso de componentes de calidad como válvulas de bloqueo y la desinfección térmica frecuente combinada con la automatización inteligente.

¡Menos es más! Menos superficie necesaria para la producción y la distribución. Menor volumen de inversión. Y menores costes de operación por m³/WFI con un elevado grado de seguridad.

La dosis exacta de las cantidades más pequeñas de antiescalante (AS) evita la obstrucción de la ósmosis inversa. El AS permanece en el concentrado con el calcio y el magnesio. Como parte de un estudio integral a largo plazo, BWT, en colaboración con una universidad independiente, probó la seguridad del proceso: el riesgo microbiológico se reduce considerablemente y no es necesaria la manipulación prolongada de la sal, como es el caso de las aguas residuales que contienen cloruros.

La mayor parte de la carga microbiológica se mantiene en la primera de las dos etapas de RO. Por lo tanto, es de crucial importancia la limpieza periódica y profesional de esta primera etapa de membrana.

Al prin­cipio, el inge­niero de servicio analiza los datos del proceso. Analiza los resul­tados con el cliente y lleva a cabo las medidas apro­piadas si es nece­sario.

Las juntas y las membranas están sujetas al envejecimiento. Por esta razón se necesita un cambio completo y documentado periódicamente. Un equipo de especialistas fiables y experimentados de BWT organiza y realiza esta compleja tarea.

La fiabilidad de la automatización y del registro de datos depende de los sensores utilizados. La supervisión y la calibración periódicas de todos los componentes que son críticos desde una perspectiva de calidad y proceso son, por lo tanto, una parte integral de cualquier buen servicio.

Los técnicos e ingenieros de servicio de BWT son especialistas en fluidos ultrapuros en entornos regulados. Saben cómo ha de ser la documentación para que todas las preguntas puedan responderse de manera clara y satisfactoria durante una auditoría o inspección.

Los técnicos e ingenieros de servicio de BWT son especialistas en medios de ultrapureza en entornos regulados. Saben cómo ha de ser la documentación para que todas las preguntas puedan responderse de manera clara y satisfactoria durante una auditoría o inspección.